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martes, marzo 28, 2006

Abejita


Abejita, originally uploaded by Rashuli.

Esta foto original, tomada con una máquina Canon Eos 350D, con un objetivo Canon USM 100 fijo macro, con Iso 100, focal 6.3, velocidad 1/200, distancia 100mm (no quedaba de otra), a pulso.

O la abeja mide 15 cm o de nuevo he seguido los pasos que indica el post

El gran secreto para "no" retocar una foto

Retoque fotográfico II

La tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita, la tirita...

Después de investigar un poco me he dado cuenta que la tirita en muchos casos es mejor que el tampón aún así no esta demás saber que existe una opción que se llama desenfoque suave, que la semana pasada tampoco conocía y que da unos resultados magnificos.

Gracias Angel, siempre la veía y pensaba: para que car... servirá esa opción con una tirita que tiene Photoshop.

Con una afición como esta no hay quien se aburra.

Retoque fotográfico

En ocasiones es muy difícil fotografiar el paisaje que te gusta sin que se interponga algún elemento extraño en el encuadre que has elegido. Evitar estos objetos puede hacer que el resultado final no sea el esperado. Una solución es usar un programa de retoque fotográfico como Photoshop.


En el siguiente caso el resultado final de la fotografía era el esperado; la curva de la vía del tren perdiéndose en la oscuridad, el colorido del atardecer, el cruce de cableados entre postes, las siluetas a contraluz, etc...




Por un momento quise imaginar como podría ser la imagen eliminando los postes de electricidad.

¿Como?

Utiliza el Tampón de Photoshop sobre los cables de los postes de electricidad, o sobre el elemento que quieras borrar en tu fotografía intentando no dejar marcas, una vez eliminados aparecen cambios de tonalidad en el cielo, para corregir estos cambios usa la varita mágica para seleccionar las zonas a tratar y por último la opción desenfoque suave tantas veces como sea necesario.

Dedica todo el tiempo que necesite y verás como el resultado habrá merecido la pena.

lunes, marzo 27, 2006

El gran secreto para "no" retocar una foto.


Margarita, originally uploaded by Rashuli.


1º- Utiliza un programa como C1 para transformar la foto de formato CRW a formato Tiff o Jpg.
2º- Ya con el programa abierto mueves algo los niveles, un poquito de mascara de enfoque y le añades un poco de temperatura.
3º- Con Photoshop recorta la foto respetando las dimensiones para que no parezca un recorte.
4º- Aclara un poco con sombra e iluminación, maravillosa opción para el "no" retoque.
5º- Con Neat Image elimina el ruido que ha aparecido por "no retocar" la foto.

Y listo para la exposición... bienvenido al maravilloso mundo de la fotografía original sin retoque.

jueves, marzo 23, 2006

Aldea Tejada

La ocupación humana de este territorio se remonta al segundo milenio a. C. Se trataba de una sociedad básicamente agropecuaria, de escasas relaciones con los minerales (Piñón, F, 1986). Pero los principales yacimientos arqueológicos se corresponden con Tejada La Vieja y Tejada La Nueva, situadas al Norte del actual núcleo de Escacena, y datada la primera en el siglo IX a. C. (Márquez, M., 1993, 5). Los orígenes de Escacena están muy ligados a los asentamientos de Tejada, Por tanto, es necesario hacer un breve repaso por los orígenes y devenir histórico de tales poblados, ocupados desde tiempos protohistóricos hasta la Baja Edad Media. El poblado de Tejada La Vieja se convirtió en un centro comercial y metalúrgico de cultura tartéssica. Se atestigua en él la presencia de murallas, útiles, viviendas y un cuidado viario. Dominaba el acceso de un área minera y metalúrgica, centrada en la obtención, manipulación y comercialización de la plata, el cobre y el plomo de la Sierra de Tejada y, minas de Aznalcóllar y la Cuenca Minera de Riotinto (Blanco A., y Rothemberg, B., 1982). Desde Tejada La Vieja se procedía al transporte del mineral para el embarque en el río Guadiamar, por entonces navegable, o directamente hacia la costa, donde se han encontrado restos de un poblado de similar cultura y datación: San Bartolomé de Almonte.

En la colección «Huelva y el Arte» se dice de este viejo yacimiento: «...abarca una superficie de casi 12 hectáreas y está rodeado por una muralla con bastiones, las paredes de ésta son de talud, con una altura aproximada de tres metros, ofreciendo una forma trapezoidal. Su técnica constructiva es de factura oriental. Se realizó levantando dos paredes de mampuestos, y se rellenó el espacio entre ellas con piedras y tierra.» Su fama alcanzará a los fenicios, deseosos de buscar productos minerales y comerciar con los pobladores del lugar. Estos confluirán culturalmente con los pobladores nativos y, con su presencia, Tejada La Vieja alcanzará su máximo esplendor entre los siglos VII y V a. C.

Desde entonces se produce un declive de este comercio minero-metalúrgico por la falta de demanda de plata por parte de los pueblos orientales, especializándose las generaciones siguientes en actividades agropecuarias. Por esta causa cobra mayor importancia otro núcleo muy próximo del primero: Tejada La Nueva. A pesar de que durante un período fueron coetáneas, el esplendor de este núcleo determinará el declive progresivo de Tejada La Vieja, cuyos pobladores la abandonarán lenta y pacíficamente, consumándose su desaparición a mediados del siglo IV a. C. (Fernández Jurado, J., 1990). Se emplaza este nuevo poblamiento en una zona topográfica más llana, inmersa en la feraz Campiña, localizada en lo que hoy se conoce como Aldea y Huerta de Tejada. Durante el dominio de Roma, a partir del siglo II a. C., la ciudad de Tejada la Nueva o Ituci, como por entonces se conocía y se nombraba en los textos, era una de las más importantes del Bajo Guadalquivir, como manifiesta la acuñación de monedas que, curiosamente, mostraban caracteres latinos y púnicos. Ello indica una antigüedad y unas relaciones intensas anteriores con los pueblos cartagineses. Antonio Delgado, en su obra Medallas autónomas españolas (1873), nos habla de tres monedas diferentes que se acuñaban.

Este territorio sufre una intensa romanización y se observan intensas relaciones comerciales con la ciudad de Itálica en las márgenes de aquel río. También se han hallado restos de un antiguo acueducto que conducía las aguas desde las inmediaciones de Ituci hasta Itálica. Además de Tejada, hay constancias arqueológicas, de esta época, de un poblamiento de «villas» rústicas o pequeños caseríos, en los parajes ahora conocidos como Fuente Seca, El Pelandrero, Cerro de las Laderas, Prado Luna y también en el fuerte de El Castrejón. Precisamente, frente a otras teorías que hacen hincapié en un origen árabe, Gordon, M. y Ruhstaller, S. (1992) mantienen, siguiendo la tesis de R. Menéndez Pidal, que la forma primitiva del nombre de Escacena vendría de «villa»» Scatius, de procedencia romana, y que sería una forma toponomástica o sufijo para designar el nombre de una «villa» o caserío rural romano. El topónimo «Campo» se añadió después al de Escacena por encontrarse enclavada en el Campo de Tejada.

Después de un período de decadencia con las invasiones bárbaras, este núcleo consigue un cierto esplendor con los musulmanes, sobre todo si se tiene en cuenta la decadencia de la vecina Itálica. Silverio Escobar dirá de Tejada: «En tiempos de los árabes fue ciudad importante, llamándola Thaliatha, y en olla había régulos independientes cuando la Reconquista, siendo entonces metrópoli de extenso territorio, conocido ahora bajo el nombre de Campo y Sierra de Tejada. El despoblado conserva aún sus torres y muros árabes, y a poca distancia, en la vertiente de la Sierra, hay ruinas de esta población antigua que llaman Tejada La Vieja (Tucci)» (Escobar y Salazar, 19 10, 94-95).

Como vemos, la larga impronta del hombre a través de Tartessos, fenicios, romanos y árabes hacen de ambas Tejadas importantísimos yacimientos arqueológicos, que atraen las miradas de curiosos y, sobre todo, de investigadores de la Historia y la Arqueología. Hasta el momento, los trabajos arqueológicos se han centrado más en Tejada La Vieja y menos en La Nueva. De la primera, Jesús Fernández Jurado (1990) nos dirá que «escribir sobre esta ciudad protohistórica es hacerlo sobre uno de los más importantes yacimientos arqueológicos de la llamada época protohistórica». El progreso y devenir de Escacena del Campo se produce de forma lenta pero imparable, desde la Edad Media, a medida que se asiste a un despoblamiento de Tejada La Nueva por parte de los musulmanes, quizás por los efectos en la pésima salubridad que origina un emplazamiento en zona muy baja, frecuentemente inundada. En las proximidades existían mejores localizaciones para el emplazamiento, en los cerros o alcores, desde donde se dominaba la campiña y la ventilación era mayor. Por ello se inicia, ya durante el dominio musulmán, un traslado masivo de su población creando o desarrollando nuevos núcleos.

La crisis demográfica de Tejada se agravará con la conquista cristiana. Será Escacena, junto a Paterna o Chucena, una de las princípiales herederas de Tejada, que aprovechará, además de buena parte de su población, sus mismas piedras para la construcción de edificios. Al principio no seña más que un conjunto de casas de labriegos, pero lentamente tomará verdadero empaque como pueblo. La conquista de la Tejada árabe y su Campo se produce en 1253 bajo el reinado del rey castellano Alfonso X, entrando a formar parte como tierra de realengo de la ciudad de Sevilla. Pacificada la zona, en el Libro del Repartimiento de Sevilla y su tierra se habla de la existencia en Tejada de «73 pares de casas, aranzadas de tierra, pan, viña y huerta». Pero también se nombra ya, e incluso con mayor riqueza económica, a un naciente «lugar» de Escacena «con 10.000 pies de olivo y 900 aranzadas de tierra» (Escobar y Salazar, S., 1910, p. 99).

Unos siglos después, consumada la total desaparición de Tejada, el censo o ltinerario de Hernando Colón, de 1541, refleja una población para Escacena de 350 «vecinos que serán unos 500 en 1575, lo que viene a significar una población real de casi 2.500 habitantes.

En el siglo XVI Escacena contaba con una iglesia parroquial, dos conventos de las Ordenes carmelita y franciscana y cuatro capillas: la de la Trinidad, Soledad, del Cristo de la Veracruz y la Misericordia. La existencia de edificios religiosos y su notable población muestran los perfiles de un pueblo ya importante entre los de su comarca. En 1575, Felipe II trató de vender la villa de Escacena a Francisco de Guzmán, marqués de Algaba. Pero será la ciudad de Sevilla quien finalmente costee el pago, evitando que saliera fuera de su jurisdicción. Desde entonces, le fue concedida el privilegio de Villa Real.

En 1833, con la formación de la provincia de Huelva, Escacena del Campo pasa a depender de ésta y del partido judicial de La Palma del Condado, en detrimento de la provincia de Sevilla, con la cual de siempre había tenido más intensas relaciones económicas e históricas. En 1860 se producen nuevas modificaciones en los límites municipales, beneficiándose Escacena, que incorpora tierras de Andévalo a costa de su vecina Berrocal.

Sanlúcar de Guadiana II

Los Guzmanes, Duques de Medina Sidonia, bautizaron esta ciudad con el nombre de su Capital Ducal a orillas del Guadalquivir, Sanlúcar de Barrameda.
En origen el pueblo se desarrolla en los alrededores del Castillo, desde donde en épocas de paz se derrama hacia el oeste encontrando su lugar natural a las orillas del Guadiana y buscando ahora, el abrazo de la Iglesia de Nuestra Señora de las Flores (XVI), iluminada con pinturas de la escuela franco - florentina y bendecida por la imagen de la Virgen de la Rábida, formidable talla barroca del XVII restaurada por León Ortega en 1980.
El carácter de frontera natural del Guadiana y la necesidad de vigilar y defender los territorios al este del río , explican la existencia del Castillo de San Marcos que desde el s. XIII es su ripuario. Su nueva planta, de 1542 e impresionantes perfiles macizos, se nos presenta hoy como un recuerdo de épocas de conflictos con el hermano estado portugués.

Sanlucar de Guadiana


Sanlucar de Guadiana, originally uploaded by Rashuli.

En la frontera con Portugal, a la margen izquierda del río Guadiana, se encuentra localizada la bella población de Sanlúcar de Guadiana, que extiende sus 96,5 km2 sobre el extremo occidental de la provincia de Huelva.
Su origen podemos encontrarlo en la ocupación árabe, ya que bajo el amparo del reino taifa de Niebla, algunos grupos musulmanes se asentaron sobre estas tierras, en este momento casi despobladas. Pero el núcleo actual de Sanlúcar se inicia en el segundo tercio del siglo XIII, cuando Sancho II de Portugal conquista estas tierras a los musulmanes, las cuales serían en un principio de realengo; pero muy pronto, desde el siglo XIV, la historia de este municipio quedará unida al alfoz de Gibraleón que a partir de entonces se afianza como pueblo hasta que en 1435 Dª Isabel de Guzmán de Ledesma le concede la merced de fundación y ordenanza como villa.
La Guerra de la independencia Portuguesa, a mediados del siglo XVII, tendrá importantes consecuencias para este municipio, ya que fue víctima del clima de violencia e indefensión propia de una guerra, sufriendo numerosos robos y saqueos, además de tener que ahcerse cargo de la manutención de la tropa española que defendía la frontera. Ante esta situación, el Conde Jerónimo Ró, maestre de campo general de esta frontera fortalecerá la villa construyendo el fuerte de San Jerónimo, junto a la Iglesia Parroquial, y más tarde, en 1642, el Castillo de San Marcos. Sin embargo, estas medidas no aseguraron la defensa de la población, ya que en varias ocasiones la villa fue ocupada militarmente por los portugueses, lo cual significó la destrucción completa de la población y el abandono de sus habitantes, que no comenzarían a retornar hasta el año siguiente.
Las constantes crecidas del río Guadiana también han sido una constante en la historia de este pueblo, destacando por sus nefastas consecuencias, la de 1823, cuando el agua alcanzó 14 metros de altura, destruyendo 110 casas de las 240 que poseía el casco urbano, lo que provocó que la población afectada tuviese que refugiarse en el castillo.
A pesar de todo ello y debido a su situación geográfica, este municipio disfrutaba de una posición estratégica que la convertía en una de las poblaciones más relevantes de la zona, ya que era un paso obligado para el comercio. Así, en el siglo XIX, el puerto de Sanlúcar de Guadiana adquirió gran importancia pues desde aquí se exportaban gran cantidad de productos entre los que destacan, aguardiente, arroz, azúcar, jabón, plomo y maderas. Actualmente es un paso fronterizo frecuentado por los barcos de los turistas que visitan la localidad. Pero lo más interesante de este municipio es el pueblo en su conjunto, su localización en una colina que cae hacía el río, la luminosidad que ofrece el encalado de sus casas, sus intrincadas cuestas, el pequeño puerto fluvial, lo cañaverales de las riberas y la vista de Alcoutim, un pequeño y blanco pueblo portugués al otro lado del río.

miércoles, marzo 22, 2006

Gaviota


Gaviota, originally uploaded by Rashuli.

En la lonja de Ayamonte mientras algunos empleados me miraban con sorpresa yo me aprovechaba de sus desechos para capturar gaviotas sobrevolando los barcos pesqueros. A pesar del cartel de prohibido pasar nadie me expulsó del recinto, se ve que notaron mi aspecto inofensivo a pesar del trabuco que llevaba entre las manos... con perdón... se llama Tamron 200-400 5.6

martes, marzo 21, 2006

Margarita


Margarita, originally uploaded by Rashuli.

Esta todo nublado desde hace unos dias, tanta lluvía no parece normal en este lugar del planeta, sin embargo aún queda gente que prefiere que deje de llover, son los que se mojan por dentro.

miércoles, marzo 15, 2006

Palacio del Acebrón (Doñana)


Palacio del Acebrón (Doñana), originally uploaded by Rashuli.

martes, marzo 07, 2006

Caño del Guadiamar


Caño del Guadiamar, originally uploaded by Raulador.

Desde Abril de 2004 no veía tanta agua a este lado de la marisma, me alegra ver que todo vuelve a la normalidad justo a un paso de la llegada de muchas aves de Africa.